Mariposa monarca (Danaus plexippus). Foto: Sergio Nolasco
Antecedentes
La Reserva de la Biosfera Mariposa Monarca se creó en 1986 con una superficie de 16,110 hectáreas y se localiza en los estados de México y Michoacán. Recientemente diferentes sectores de la sociedad solicitaron una revisión del decreto por la inoperatividad del área protegida y en el año 2000, tras pasar por varios procesos de consulta y conciliación de intereses, se realizó una redelimitación a su actual extensión de 56,259 has. La zonificación del área protegida comprende tres zonas núcleo con una superficie total de 13,551 has. y dos zonas de amortiguamiento con 42,707 has.
Entre los factores físicos del área destaca la altitud que va de los 2,400 a los 3,600 msnm. El clima es templado subhúmedo con lluvias en verano, la temperatura media anual es de 8 a 22 ºC y la precipitación promedio de 700 a 1250 mm. La vegetación es dominada por las confieras y los diferentes tipos de asociaciones corresponden a bosques de oyamel (Abies religiosa), pino (Pinus pseudostrobus, P. rudis, P. teocote), encino (Quercus laurina, Q. rugosa, Q. castanea) y cedro (Cupresus lindley).
La fauna silvestre que se encuentra en esta Reserva es muy importante y podríamos mencionar entre los datos conocidos que existen 132 especies de aves, 56 especies de mamíferos, cuatro anfibios y seis reptiles. Sobresale la presencia de la Mariposa Monarca (Danaus plexippus), ya que por esta especie se decidió proteger su hábitat en los años 80.
La especie
Durante los meses de primavera y verano, de abril a septiembre, la mariposa monarca estalla estacionalmente por la abundancia de las plantas de algodoncillo (Asclepiadaceae). En este periodo las poblaciones se incrementan en cientos de millones de individuos desde el norte de Estados Unidos y sur de Canadá. Cada otoño estos insectos contienen su fisiología reproductiva y emprenden su migración de hasta 4,500 km para evitar los crudos inviernos del norte. Una sub población lo hace desde el oeste hacia los sitios que se encuentran a lo largo de la costa de California. La otra desde el este, a través de las montañas Rocallosas. La gran mayoría de estos pequeños pero grandiosos insectos emigra hacia el este a los sitios de hibernación en los bosques altos de oyamel del Eje Neovolcánico Transversal del Estado de México y de Michoacán. Aquí las mariposas permanecen durante cinco meses y después regresan a recolonizar sus sitios reproductivos al norte del continente.
Las montañas donde se establecen las colonias de mariposas alcanzan altitudes entre los 3,000 y 3,500 msnm, con extensiones variables. En la Reserva de la Mariposa Monarca se han identificado cinco principales santuarios donde se establecen las colonias en Sierra Chincua, Sierra del Campanario, Sierra Chivatí, Cerro Pelón y Cerro Altamirano.
Las causas naturales de muerte de las mariposas en los sitios de hibernación son: por congelación a temperaturas bajo cero, cuando se exponen al viento en sitios abiertos durante la noche y por tormentas que dañan gravemente las colonias. También debido a las bajas reservas de lípidos almacenadas para su hibernación, así como por las temperaturas mayores a 25 ºC que ocasionan su actividad y gasto de lípidos. Además de los depredadores naturales como las aves y pequeños mamíferos.
Sin embargo, los mayores impactos son causados por los seres humanos al desarrollar actividades como la tala para aprovechamientos de madera y celulosa. De esta forma se destruye los bosques de hibernación, se disminuye la cobertura forestal y las mariposas se encuentran más expuestas a insolaciones, temperaturas extremas y daños por tormentas. Los fuegos intencionales o con fines agrícolas y ganaderos son otra amenaza que ocasiona el movimiento de las colonias con el respectivo gasto de lípidos e incremento en el riesgo de congelación y de ser depredadas. El turismo puede ser otra actividad que si no es bien manejada puede causar disturbios y riesgos graves para la especie.
Acciones
En el año 2000, después de haberse ampliado la superficie de la Reserva, se creó el Fondo para la Conservación de la Mariposa Monarca (FCMM), con la aportación de recursos de la Fundación Packard de los Estados Unidos, con el Gobierno Federal Mexicano, los gobiernos de los estados de México y Michoacán, reuniendo un total de 6,500,000 dólares, administrados por el World Wildlife Fund (WWF) y el Fondo Mexicano para la Conservación de la Naturaleza. Con este fondo y los intereses que se generan, se pretende cambiar actitudes y conciencias de los propietarios de tierras con cubierta forestal, por medio de pagos a cambio de cumplir con los compromisos de no cortar los árboles.
Bajo esta estrategia de conservación también se ha implementado un sistema de monitoreo por fotografías aéreas para comprobar el estado de conservación del bosque. Otros esquemas de participación comunitaria consisten en actividades de vigilancia, prevención de incendios, manejo de cuencas y restauración.
Situación actual
En los últimos tres años (2001 – 2003) la deforestación de los bosques se ha mantenido y pareciera que acelera. A pesar que las comunidades locales y organizaciones no gubernamentales han realizado constantes denuncias contra los talamontes, esta actividad no se detiene y las autoridades federales y estatales se han visto rebasadas por los infractores.
En este año 2004, el WWF público en su sitio Web el informe \”La tala ilegal y su impacto en la Reserva de la Biosfera Mariposa Monarca\”, donde señala que del 2001 al 2004 se han talado por lo menos 370 has. en la zona de amortiguamiento y 141 has han sido deterioradas en la zona núcleo de la Reserva. De las 28 comunidades donde los talamontes han afectado la superficie, 23 se encuentran en la zona núcleo, lo que representa una grave amenaza para la especie, además que lo dispuesto en el Decreto Presidencial del año 2000 con respecto a la prohibición de cortar árboles no es respetado en lo absoluto.
El análisis demuestra claramente por medio de fotografías aéreas del 2001 y 2003 cómo la superficie arbolada ha desaparecido por completo en ejidos tales como Francisco Serrato. Como se explicó anteriormente, la sola desaparición de algunos árboles puede causar efectos negativos en las colonias, lo que nos hace pensar que amenazas como la tala ilegal de esta magnitud pueden generar a corto plazo efectos irreversibles.

Fotografías aéreas del monitoreo de cobertura forestal realizado por el WWF-México durante el año 2001 y 2003 para el ejido Francisco Serrato, afectado por la tala ilegal.
Más aún nos sorprenden los niveles en que los diferentes sectores luchan por conservar este patrimonio de la humanidad. Por su parte, las comunidades y propietarios de tierras han gestionado apoyos para abrir zanjas profundas en los diferentes caminos que dan acceso a las zonas forestales para detener a los taladores ilegales. Sus denuncias suman más de 40 a diferentes autoridades locales y federales, sin que se hayan atendido de forma clara y oportuna para evitar la destrucción del bosque.

Construcción de zanjas en caminos usados por talamontes. Foto: WWF-México
El pasado mes de julio la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales anunció una inversión de 180 millones de pesos para apoyar el desarrollo de la Reserva y combatir de forma frontal la tala ilegal.
A su vez, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) señaló que esta institución ha puesto en marcha uno de los sistemas más sofisticados de vigilancia y radiocomunicación en los bosques de la Mariposa Monarca. El sistema permitirá a los inspectores de dicha institución mantenerse en comunicación permanente con las autoridades federales, estatales y municipales, así como con el Sistema Nacional de Seguridad Pública. El equipo consiste de 29 videocámaras y 300 radios de alta tecnología satelital con un valor de más de 41 millones de pesos.

La ONG S.O.S. Tierra, entre otras, participó en un proyecto de reforestación. Foto: Gerardo Carreón
Otros esfuerzos paralelos de las ONG se vienen desarrollando en sitios que han sido afectados por la deforestación. El caso más reciente se llevó a cabo en el mes de julio, en el predio El Llano, Municipio de Temascaltepec, Estado de México. En este lugar se reforestó una superficie de 20 has. con alrededor de 22,000 árboles. Al evento, convocado por el Grupo Operación Ecológica S.O.S Tierra, acudieron entre otros los representantes del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), de la UNESCO y de organizaciones locales, entre las que figuraron Naturalia y ParksWatch.

Reforestación en la Reserva de la Biosfera Mariposa Monarca. De lo que sí podemos estar seguros es del interés de la sociedad civil en recuperar los bosques perdidos y mantener en nuestro territorio a este pequeño pero formidable viajero, la Mariposa Monarca. Foto: Gerardo Carreón
Se vislumbra un gran reto para el futuro cercano de la Reserva de la Biosfera Mariposa Monarca. A pesar de que los recursos económicos dispuestos hasta ahora para atender las amenazas son muy importantes, no quiere decir que la resolución de sus problemas vaya a ser fácil, particularmente el de la tala ilegal. En especial dado que en los últimos años no se ha observado una voluntad política real por solucionarlos.
Las graves condiciones a la que se ha llevado esta área protegida señalan una etapa en la cual las acciones que se emprendan hoy marcarán la diferencia para el futuro y el legado a las nuevas generaciones. Como sociedad civil podemos ser actores activos y exigir el cumplimiento de las leyes y compromisos del gobierno para con los recursos de todos los mexicanos.
Referencias
1. Calvert, H. W., Malcolm, B. S., Glendenning, I. J., Brower, P. L., Zalucki, P. M., Van Hook, T., Anderson, B. J, y Snook, C. L. 1989. Vida Silvestre Neotropical. 2(1): 38-48.
2. CONANP. 2001. Programa de Manejo Reserva de la Biosfera Mariposa Monarca. 159 pp.
3. http://www.semarnat.gob.mx/wps/portal/.cmd/cs/.ce/155/.s/1555/_s.155/1441
4. http://www.wwf.org.mx/wwfmex/n_010604_talaMariposa.php
ParksWatch-México, Gerardo Carreón, Septiembre 2004